Desde horas de la mañana hasta la tarde la gente no dejaba de visitar el cementerio municipal, por todo el camino estuvieron los vendedores de flores, bebidas y comidas, especialmente de la serranía de nuestro país. En el interior se encontraron aun más personas, muchos de ellos se quedaron para almorzar y tomar, unos llamaban a los rezadores y otros contrataban a la banda de músicos que estuvo gran parte del día en el recinto. En este año ya no está el pozo de agua, al que siempre lo veíamos sucio y deteriorado, ahora está modificado y tapado, con grifos de agua para un mejor servicio.